Capítulo 1: Alejandro y la Búsqueda del Cliente Perdido

Alejandro es un tipo listo. No de esos que leen cinco libros de emprendimiento al mes o se despiertan a las 5 a.m. para meditar mientras beben té de matcha. No. Alejandro es un tipo de negocios, de los que huelen las oportunidades desde lejos. Su mundo son los remates hipotecarios: casas, departamentos y terrenos que los bancos sueltan a precios de ganga y que él revende con un margen saludable.

El año pasado, facturó un millón y medio de pesos. No está mal, ¿verdad? Pero este año las cosas han cambiado. Las ventas han bajado, los clientes parecen haberse esfumado y, aunque su negocio sigue funcionando, Alejandro siente que podría estar en otro nivel. Es como tener una mina de oro, pero sin suficientes mineros para sacarlo.

La gran pregunta: ¿Dónde están los inversionistas que deberían estar haciendo fila para comprarle?

Alejandro hace lo que muchos emprendedores hacen cuando ven que la clientela se desacelera: empieza a subir historias en Instagram, a publicar en Marketplace y a depender de su red de contactos en bienes raíces. Pero hay un problema. Bueno, varios. Uno, no tiene una estrategia clara. Dos, su presencia digital es como un cartel de “Se vende” en un callejón sin salida. Tres, la gente que lo contacta muchas veces no es su cliente ideal.

Y aquí es donde entra el dilema universal del emprendedor: 👉 "¿Cómo demonios consigo clientes de calidad y de manera constante?"

La Revelación: No es el Producto, es la Estrategia

Cuando Alejandro me contactó por Facebook, supe que tenía un diamante en bruto. Su modelo de negocio es brillante: no solo vende propiedades en remate, sino que se encarga de todo el proceso legal, desde la papelería hasta la apertura de la propiedad con las autoridades correspondientes. A diferencia de otros vendedores que solo pasan los papeles y se desentienden, él ofrece un servicio premium. Es como la diferencia entre comprar un coche en una subasta sin garantía o sacarlo de la agencia con todo en regla.

El problema de Alejandro no es su producto. No es su capacidad de vender. Es su embudo de clientes. Depender solo de su círculo cercano y redes sociales sin una estrategia es como pescar con las manos: a veces funciona, pero es agotador y poco escalable.

La Solución: Construir un Sistema de Atracción de Clientes

Le propuse un camino diferente. No se trata solo de publicar más en redes sociales, sino de hacerlo con intención. Crear contenido estratégico que eduque y atraiga a su cliente ideal: inversionistas con capital, que buscan oportunidades de negocio y que valoran un servicio llave en mano como el que él ofrece.

💡 Próximos pasos para Alejandro:

1️⃣ Definir a su cliente ideal con precisión quirúrgica.

2️⃣ Construir una estrategia de contenido para atraer a esos inversionistas.

3️⃣ Implementar un sistema de captación de prospectos que funcione en automático.

El objetivo: que Alejandro no tenga que salir a cazar clientes, sino que los clientes lleguen a él.

La pregunta es… ¿funcionará? ¿Podrá pasar de vender esporádicamente a tener un flujo constante de inversionistas listos para comprar? Lo sabremos en el próximo episodio.

👉 Si te identificaste con Alejandro y también sientes que te faltan clientes, pero no sabes cómo atraerlos de manera constante, hablemos. Quizá tu negocio sea el próximo caso de éxito. 😉